Un asalto frustrado
Me bajé del colectivo que me llevó desde la av. Guelatao en Iztapalapa hasta la estación del metro Agricola Oriental en Iztacalco el sábado pasado a las 21:15 horas, cuando comencé a caminar para entrar a las instalaciones del metro recibí una llamada, era Erika, me preguntaba cuanto tiempo me faltaba para llegar al lugar donde nos habiamos citado, le iba a contestar, cuando note que, para subir las escaleras del metro había dos caminos. Uno por la avenida, donde había mucha gente, coches y colectivos y otro por un pasillito muy breve despejado en el que, seguramente llegaría mas rápido. Opté por la segunda opción.
Cuando entre al pasillo de 3 o 4 metros de largo un sujeto me vió y caminó a prisa hacia mi, yo mientras oía que al telefono Erika me decía no se que cosa, comencé a correr para terminar de recorrer el pasillito y al mismo tiempo "sacarle la vuelta" rapidamente al prietito.
Justo cuando estuvo a mi altura, el caquito se llevó la mano a la parte de abajo de su camisa y me gritó algo, insinuando sacar una pistola,yo no lo escuché o no quise hacerlo, me hice güey y corrí mas rapido, el fin del tunel estaba a 4 o 5 pasos.
El Rata intentó detenerme agarrandome de la playera, y en un movimiento que no sabría explicar aun, le di un madrazo en la mano con la que me quería sujetar, brinqué y giré en el aire evadiendolo al instante en que grite con güevos: ¡¡Un pinche ratero!!!.
La gente que estaba al final del tunel volteó rapidamente y el caquito, espantado, salió corriendo despavorido. Yo retomé la llamada con Erika, ella no se dió cuenta de nada, le dije lo sucedido y creo que se espantó, confirme mi asistencia a la cita, llegué antes que ella y juntos nos encontramos con Julio y Sara para ir a ver a los Rebel Cats.
Nunca pensé las acciones, solo las actué, creo que fueron un gran riesgo pero en ese momento asi hice las cosas, sobre todo porque yo vi al transa antes que el a mi y noté todos sus movimientos. Para mi es un hecho aislado, justo 2 días despues de vivirlo indirectamente a traves del Doko y Monikenus quienes vivieron un asalto consumado. La única conclusión es que hay que andar como dijo Berta: !Siempre Alerta! en esta ciudad llena de caquitos. Y cuando te distraes, coincido en ¿¡Disfrutar el momento!?. ¿Apoco no?.
Comentarios
Lo bueno es que no te paso nada y a nosotros tampoco. Que curioso, hora hasta les agradecemos a estos cabrones que no nos hicieron nada, Que Caray!
En fin... en el país de no pasa nada, si que pasan cosas no creen?
Y como ésta deben haber muchas historias...
Vivimos esto a diario, pero ¿por qué se nos hace tan normal?, ¿es que acaso siempre vamos a facilitarles las cosas y regalarles lo que nos ha costado a nosotros nadamas para que nos den la oportunidad de vivir?
Me da coraje porque son unos parásitos que no aportan nada a la humanidad. No soy nadie para juzgar el derecho a la vida, pero ¿porqué es mas valiosa su vida que la mía?
Que bueno que la libraste.